Quiste Pilonidal

El quiste pilonidal es una pequeña bolsa o cavidad que se forma debajo de la piel, generalmente en la base de la columna vertebral, cerca del pliegue entre los glúteos. Dentro del quiste se pueden acumular pelo, piel muerta y otras impurezas. Cuando se infecta, provoca una inflamación dolorosa conocida como absceso pilonidal.

¿Cómo comprobar los signos y síntomas del quiste pilonidal?

Para detectar si se trata de un quiste pilonidal, debes observar los siguientes signos y síntomas, que suelen desarrollarse de manera progresiva:

  • Dolor o molestia al sentarse o al caminar.
  • Inflamación o enrojecimiento en la zona baja de la espalda, justo por encima del glúteo.
  • Secreción de pus o sangre, que puede tener mal olor.
  • Aparición de un orificio o bulto visible en el área afectada.
  • En algunos casos, fiebre o sensación de malestar general, si la infección es severa.

Es importante revisar la zona con cuidado y, si se observa alguno de estos signos, considerar la posibilidad de un quiste pilonidal.

Causas comunes del quiste pilonidal

Las causas más comunes del quiste pilonidal están relacionadas con:

  • Presencia de vello encarnado, que al crecer hacia adentro irrita la piel y causa inflamación.
  • Fricción o presión constante, como estar sentado por períodos prolongados.
  • Higiene inadecuada o sudoración excesiva en la zona.
  • Factores genéticos o predisposición familiar.
  • Más común en personas con mucho vello corporal o con sobrepeso.

Estas causas explican por qué es más frecuente en conductores, oficinistas, estudiantes o cualquier persona que permanece mucho tiempo sentada.

Que hacer y que no hacer para aliviar los síntomas

Cosas que SÍ debes hacer:

  • Mantén la zona limpia y seca. Lava diariamente con agua tibia y jabón neutro.
  • Evita estar mucho tiempo sentado. Toma pausas frecuentes si trabajas sentado.
  • Ropa holgada y transpirable. Ayuda a reducir el sudor y la fricción.
  • Aplicar compresas tibias puede aliviar el dolor y promover el drenaje del quiste.
  • En caso de dolor leve, puedes usar analgésicos como paracetamol o ibuprofeno.

Cosas que NO debes hacer:

  • No intentes exprimir el quiste. Esto puede empeorar la infección.
  • No uses pomadas sin receta. Algunas cremas pueden irritar más la zona.
  • Evita rasurar agresivamente. El rasurado inapropiado puede causar vellos encarnados.

Seguir estas indicaciones puede evitar complicaciones y ayudar a reducir el dolor.

Posible tratamiento para el quiste pilonidal

El tratamiento del quiste pilonidal depende de su gravedad. Las opciones más comunes incluyen:

  1. Drenaje del quiste: Si está infectado, el médico puede realizar una pequeña incisión para extraer el pus. Es un procedimiento rápido y ambulatorio.
  2. Antibióticos: En caso de infección leve o para complementar el drenaje.
  3. Cirugía: Si el quiste es recurrente o muy grande, se recomienda la extirpación quirúrgica completa. Existen técnicas modernas con mejor cicatrización y menor riesgo de recaída.
  4. Cuidado postoperatorio: Incluye limpieza diaria, curaciones y evitar sentarse por mucho tiempo hasta que sane completamente.

¿Cuándo ir al médico?

Debes acudir al médico si:

  • El dolor se vuelve intenso y persistente.
  • Hay fiebre o sensación de malestar general.
  • Aparece una secreción continua o maloliente.
  • El quiste reaparece después de un tratamiento anterior.
  • Notas una masa firme o dura que no mejora con el tiempo.

El médico familiar o un cirujano general puede ayudarte a evaluar la mejor opción para ti o tu familiar.

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