Nota Importante: Este artÃculo es exclusivamente informativo. No recomendamos la automedicación. Siempre consulte a un médico para obtener un tratamiento adecuado.
La insulina glargina es un tipo de insulina de acción prolongada que se utiliza para controlar los niveles de glucosa en sangre en pacientes con diabetes mellitus tipo 1 y tipo 2. Su efecto suave y duradero permite un control basal constante durante 24 horas o más, ayudando a mantener los niveles de azúcar estables entre comidas y durante la noche.
Usos, Recomendaciones y Dosis Permitidas
Usos:
- Control a largo plazo de la diabetes mellitus tipo 1.
- Tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2 en pacientes que no logran un control adecuado con antidiabéticos orales.
- Prevención de complicaciones asociadas a niveles descontrolados de glucosa en sangre.
Dosis:
- La dosis debe ser individualizada según las necesidades del paciente, tomando en cuenta el peso, niveles de glucosa en sangre y otros tratamientos concomitantes.
- Usualmente, se administra una vez al dÃa, preferiblemente a la misma hora, con una dosis inicial de 0.2 a 0.4 unidades/kg para pacientes recién diagnosticados o ajustada según el control glicémico.
- Se requiere un monitoreo constante de la glucosa en sangre para ajustar la dosis.
Recomendaciones:
- Utilizar un dispositivo de administración adecuado, como una pluma precargada o jeringas especÃficas para insulina.
- Realizar controles regulares de glucosa capilar y seguir las pautas de su médico.
- Nunca mezcle insulina glargina con otras insulinas en la misma jeringa, ya que esto puede alterar su acción.
¿Quién Puede y No Puede Usarla?
Puede usarla:
- Personas con diabetes tipo 1 de cualquier edad.
- Pacientes con diabetes tipo 2 que necesiten insulina basal como complemento de otros tratamientos.
No debe usarse:
- En episodios de hipoglucemia activa.
- En personas con alergia conocida a la insulina glargina o cualquiera de sus componentes.
- En infusiones intravenosas, ya que está diseñada solo para administración subcutánea.
¿Cuándo y Cómo Usarla?
Cuándo usarla:
La insulina glargina se administra generalmente una vez al dÃa, a la misma hora, independientemente de las comidas.
Cómo usarla:
- Asegúrese de que el área de aplicación esté limpia y seca (abdomen, muslo o brazo).
- Cambie el sitio de inyección en cada aplicación para evitar lipodistrofias (alteraciones del tejido graso).
- Inyecte subcutáneamente, siguiendo las instrucciones del dispositivo o jeringa.
- No interrumpa el tratamiento sin consultar a su médico.
Efectos Secundarios
Comunes:
- Hipoglucemia (bajos niveles de azúcar en sangre), que puede manifestarse con sÃntomas como sudoración, temblores, palpitaciones y confusión.
- Dolor leve o enrojecimiento en el sitio de inyección.
Menos comunes:
- Lipodistrofias (engrosamiento o adelgazamiento de la piel en el sitio de inyección).
- Reacciones alérgicas, como picazón o urticaria.
Si experimenta sÃntomas severos, como pérdida de conocimiento o dificultad para respirar, busque atención médica de inmediato.
Uso Durante el Embarazo y la Lactancia
- Embarazo: La insulina glargina se considera segura para el tratamiento de la diabetes durante el embarazo bajo supervisión médica. Ayuda a mantener niveles óptimos de glucosa para prevenir complicaciones maternas y fetales.
- Lactancia: Puede usarse durante la lactancia, ya que no se sabe que afecte al lactante. Sin embargo, el médico debe ajustar las dosis según los cambios metabólicos postparto.
Interacciones con Otros Medicamentos
La insulina glargina puede interactuar con:
- Medicamentos que aumentan el riesgo de hipoglucemia: Otros antidiabéticos, inhibidores de la ECA, beta-bloqueadores, y alcohol.
- Medicamentos que pueden aumentar la glucosa en sangre: Corticosteroides, diuréticos, anticonceptivos orales, y hormonas tiroideas.
- Beta-bloqueadores: Pueden enmascarar los sÃntomas de la hipoglucemia, dificultando su identificación.
Informe a su médico sobre cualquier medicamento que esté tomando antes de iniciar la insulina glargina.