Hipertrofia de Cornetes

La hipertrofia de cornetes es el agrandamiento de los cornetes nasales, que son unas estructuras ubicadas dentro de la nariz, a ambos lados, cuya función principal es calentar, humedecer y filtrar el aire que respiramos. Cuando estos cornetes se inflaman de manera crónica o aumentan su tamaño, pueden obstruir el paso del aire, dificultando la respiración y generando una sensación constante de nariz tapada.

Esta condición es más común de lo que parece y puede afectar tanto a niños como adultos, siendo muchas veces confundida con un resfriado mal curado o alergias persistentes.

¿Cómo comprobar los signos y síntomas?

Para saber si alguien tiene hipertrofia de cornetes, hay que observar los siguientes síntomas característicos:

  • Congestión nasal permanente, que no mejora con medicamentos comunes.
  • Dificultad para respirar por la nariz, especialmente al dormir.
  • Ronquidos o sueño interrumpido.
  • Dolor o presión facial leve, por la falta de aire.
  • Dolores de cabeza frecuentes.
  • Algunas personas pueden tener también secreción nasal o disminución del olfato.

Una forma casera de comprobar si hay obstrucción nasal es tapar un lado de la nariz y respirar por el otro; si el paso de aire es muy reducido o nulo, puede indicar hipertrofia de cornetes. Sin embargo, el diagnóstico preciso lo debe hacer un médico mediante una rinoscopia o endoscopía nasal.

Causas comunes de la hipertrofia de cornetes

Las causas más frecuentes de esta condición incluyen:

  • Rinitis alérgica crónica: la exposición constante a alérgenos como polvo, ácaros, pelo de animales o polen provoca inflamación continua.
  • Rinitis vasomotora: alteración del sistema nervioso que controla los vasos sanguíneos nasales.
  • Infecciones respiratorias frecuentes: resfriados o sinusitis mal tratadas.
  • Exposición a irritantes, como humo de cigarrillo, contaminantes o productos químicos.
  • Uso excesivo de descongestionantes nasales: pueden provocar un efecto rebote que empeora la congestión.
  • En algunos casos, factores estructurales, como desviación del tabique nasal, favorecen la hipertrofia de los cornetes.

Qué hacer y qué no hacer para aliviar los síntomas

Lo que SÍ se debe hacer:

  • Realizar lavados nasales con solución salina para limpiar la mucosa.
  • Usar humidificadores en ambientes secos.
  • Consultar al médico sobre el uso de corticoides en spray nasal.
  • Identificar y evitar los alérgenos que puedan estar provocando la inflamación.
  • Dormir con la cabeza un poco elevada para facilitar la respiración.

Lo que NO se debe hacer:

  • No abusar de los descongestionantes nasales de venta libre (como oximetazolina), ya que pueden empeorar la situación.
  • No automedicarse con antibióticos ni antihistamínicos sin indicación médica.
  • Evitar el contacto con humo de cigarro, perfumes fuertes o aerosoles que irriten la nariz.
  • No ignorar los síntomas por largos periodos; lo que comienza como algo leve puede hacerse crónico.

Posibles tratamientos para la hipertrofia de cornetes

El tratamiento puede variar dependiendo del grado de hipertrofia y la causa subyacente:

  • Medicamentos antiinflamatorios: como corticoides nasales en spray o antihistamínicos si hay alergia.
  • Inmunoterapia (vacunas) para personas con rinitis alérgica persistente.
  • Tratamientos con radiofrecuencia o láser: para reducir el tamaño de los cornetes sin cirugía invasiva.
  • Cirugía de reducción de cornetes (turbinoplastia): en casos severos o cuando no hay respuesta al tratamiento médico.

Todos estos tratamientos deben ser evaluados por un otorrinolaringólogo.

¿Cuándo ir al médico?

Debes consultar con un médico si:

  • La congestión nasal es constante y no mejora con lavados o medicamentos comunes.
  • Tienes dificultad para dormir, ronquidos intensos o cansancio al despertar.
  • Presentas pérdida de olfato o dolor facial frecuente.
  • Has usado descongestionantes más de 5 días seguidos sin alivio.
  • Notas que respiras mejor solo por la boca.

Un diagnóstico adecuado y a tiempo puede evitar complicaciones como infecciones crónicas o la necesidad de cirugía urgente.

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