
La erisipela es una infección bacteriana de la piel que afecta las capas superficiales (dermis) y se extiende hacia el tejido subcutáneo. Se manifiesta como una zona roja, inflamada, caliente y dolorosa, con bordes bien definidos. Generalmente es causada por bacterias del grupo estreptococo, especialmente Streptococcus pyogenes.
Es más común en piernas, pero también puede presentarse en la cara, brazos o abdomen. Aunque suele ser tratable, si no se atiende a tiempo puede generar complicaciones graves como abscesos, celulitis o incluso septicemia.
¿Cómo comprobar los signos y síntomas?
Para identificar la erisipela, observa los siguientes signos:
- Zona de piel roja e inflamada, con bordes bien delimitados.
- Dolor y calor local en la zona afectada.
- Hinchazón o edema, especialmente en piernas o pies.
- Fiebre alta y escalofríos, que pueden aparecer antes de que se note la lesión.
- Ampollas o vesículas en casos más severos.
- Malestar general, cansancio y dolor muscular.
Puedes comprobar en casa tocando la zona: si está caliente, roja y causa dolor al presionar, y además tienes fiebre, es probable que se trate de erisipela. Sin embargo, el diagnóstico debe confirmarlo un médico.
Que hacer y que no hacer para aliviar los síntomas
Qué hacer:
- Acudir al médico de inmediato para iniciar tratamiento con antibióticos.
- Mantener la zona limpia y elevada si afecta una extremidad.
- Tomar antibióticos orales o inyectables según la indicación médica.
- Reposar y controlar la fiebre con antipiréticos como paracetamol.
Qué no hacer:
- No aplicar cremas o remedios caseros sin indicación médica.
- No automedicarse con antibióticos sin receta.
- Evitar rascarse o manipular la zona afectada.
- No ignorar la fiebre ni el dolor persistente.
Causas comunes de la erisipela
Las causas más frecuentes están relacionadas con lesiones en la piel o condiciones médicas que facilitan la entrada de bacterias. Estas incluyen:
- Heridas, grietas o cortes en la piel.
- Micosis interdigitales (hongos en los pies).
- Picaduras de insectos.
- Úlceras por presión o mala circulación.
- Enfermedades como diabetes, insuficiencia venosa o linfedema.
También es más común en personas con sistema inmunológico debilitado o que han tenido episodios previos de erisipela.
Posible tratamiento de la erisipela
El tratamiento debe iniciarse lo antes posible para evitar complicaciones. Incluye:
Antibióticos:
- Penicilina es el tratamiento de elección, por vía oral o intravenosa, según la severidad.
- En pacientes alérgicos, se pueden usar eritromicina o clindamicina.
Cuidados generales:
- Reposo y elevación de la extremidad afectada.
- Tratamiento sintomático con antipiréticos y analgésicos.
- Hidratación adecuada.
Hospitalización:
- Se indica en casos graves, pacientes inmunodeprimidos o si hay signos de diseminación sistémica.
La mayoría de los pacientes mejora en 48-72 horas con el tratamiento adecuado.
¿Cuándo ir al médico?
Debes consultar al médico de inmediato si:
- Tienes fiebre y notas una zona roja, dolorosa e inflamada en la piel.
- El enrojecimiento se expande rápidamente o aparecen ampollas.
- El dolor aumenta y no mejora con medicamentos comunes.
- Ya has tenido episodios anteriores de erisipela.
- Eres diabético, tienes problemas circulatorios o presentas llagas en los pies o piernas.
El diagnóstico se basa en la evaluación clínica, pero a veces se requieren análisis de sangre o cultivos para confirmar la causa.