
Con la llegada del calor, muchas personas notan que su piel cambia: suda más, se siente más grasosa y, en algunos casos, comienzan a aparecer granitos, espinillas o brotes de acné. Esto no solo afecta la apariencia, también puede ser incómodo o doloroso. Afortunadamente, con una rutina sencilla y algunos cuidados diarios, es posible mantener la piel sana y libre de brotes, incluso en los días más calurosos.
Este consejo es útil para adolescentes, adultos, y cualquier persona que viva en zonas de clima cálido y desee cuidar su piel sin necesidad de productos costosos o complicados.
¿Por qué el calor favorece el acné?
En climas cálidos, la piel suda más para mantener el cuerpo fresco. Este sudor se mezcla con el sebo natural (grasa de la piel) y, si no se limpia adecuadamente, puede tapar los poros. Esto favorece la aparición de:
- Espinillas (puntos negros)
- Barros (puntos blancos)
- Granitos inflamados
Además, la humedad favorece el crecimiento de bacterias en la piel, lo que puede empeorar el acné.
Cuidados básicos para prevenir brotes
1. Lava tu cara dos veces al día
Usa agua tibia y un limpiador suave, no abrasivo. Evita jabones fuertes que resequen demasiado, ya que la piel puede reaccionar produciendo más grasa.
2. No te laves en exceso
Lavar la cara más de dos veces al día puede irritar la piel. La idea es eliminar el exceso de grasa, no dejar la piel seca.
3. Usa una toalla limpia y exclusiva para la cara
Seca tu rostro con suaves toques, sin frotar. Cambia la toalla regularmente para evitar la acumulación de bacterias.
4. Hidrata tu piel
Aunque tengas piel grasa, no debes saltarte la hidratación. Usa un humectante ligero, preferiblemente en gel o libre de aceite («oil-free»).
5. Protege tu piel del sol
El sol puede irritar la piel y aumentar la producción de grasa. Usa protector solar todos los días, incluso si no vas a la playa. Elige uno que no tape los poros (no comedogénico).
6. Evita tocarte la cara con las manos sucias
Las manos llevan bacterias y grasa. Tocarse constantemente puede empeorar el acné.
7. No revientes los granitos
Aunque sea tentador, apretar los granitos puede dejar cicatrices y causar más inflamación.
8. Cuida tu alimentación
El exceso de alimentos muy grasosos o azucarados puede influir en el estado de la piel. Bebe suficiente agua y prioriza frutas y verduras.
9. Evita maquillaje pesado o productos grasos
Usa maquillaje liviano y retíralo completamente antes de dormir. Opta por productos etiquetados como “no comedogénicos”.
10. Cambia la funda de la almohada con frecuencia
El sudor, grasa y restos de productos se acumulan en la almohada. Cambiar la funda al menos dos veces por semana ayuda a mantener la piel limpia.
¿Cuándo consultar al médico?
Si a pesar de estos cuidados el acné es muy persistente, doloroso o deja manchas, es momento de consultar con un médico. Puede recomendar tratamientos específicos, como cremas, pastillas o limpieza dermatológica.