¿Cómo manejar la ansiedad antes de una intervención quirúrgica?

Consejos sencillos para afrontar el miedo con calma

Saber que uno va a ser operado puede generar nervios, preocupación e incluso miedo. Es completamente normal sentirse ansioso antes de una intervención quirúrgica, por pequeña que sea. Esa mezcla de incertidumbre, temor al dolor o al resultado puede hacer que la espera se sienta larga y difícil. Sin embargo, existen formas sencillas y efectivas de calmar la mente y prepararse con serenidad.

¿Por qué sentimos ansiedad antes de una cirugía?

La ansiedad es una reacción natural del cuerpo ante lo desconocido o aquello que percibimos como una amenaza. Antes de una cirugía, muchas personas piensan en:

  • ¿Saldrá todo bien?
  • ¿Sentiré dolor?
  • ¿Me voy a recuperar rápido?
  • ¿Y si pasa algo malo?

Estas dudas generan tensión, insomnio, mal humor o incluso molestias físicas como dolor de estómago o palpitaciones.

¿Cómo puedo calmarme antes de la operación?

Aquí tienes algunos consejos prácticos:

1. Habla con tu médico

Pedir información detallada sobre el procedimiento ayuda a reducir el miedo. Pregunta todo lo que necesites saber:

  • ¿Cuánto dura la operación?
  • ¿Me van a dormir?
  • ¿Cómo será la recuperación?

Saber qué esperar tranquiliza mucho.

2. Evita buscar información alarmante en internet

No todo lo que se lee en línea es cierto. Cada persona es diferente. Confía en el equipo médico que te atiende.

3. Prepara tus cosas con tiempo

Tener lista tu maleta, tus documentos y saber quién te acompañará ese día puede darte una sensación de control.

4. Practica la respiración profunda

Respirar lento y profundo es una técnica simple y poderosa para calmar la ansiedad. Intenta esto:

  • Inhala por la nariz contando hasta 4
  • Retén el aire por 4 segundos
  • Exhala suavemente por la boca contando hasta 4

Hazlo varias veces seguidas cuando te sientas tenso.

5. Mantén una rutina relajante el día anterior

Escucha música suave, toma una ducha caliente, lee un libro o mira una película tranquila. Evita noticias o conversaciones estresantes.

6. Habla con alguien de confianza

A veces, expresar nuestros miedos a un familiar o amigo ayuda a liberar tensiones. No estás solo/a.

7. Duerme lo mejor que puedas

Aunque no siempre es fácil, descansar bien la noche anterior ayuda a llegar con más energía y menos nervios. Si no logras dormir, al menos intenta descansar acostado en silencio.

8. Confía en el equipo médico

Los cirujanos, anestesistas y enfermeros están entrenados para cuidar de ti. Han hecho muchas operaciones como la tuya y saben cómo ayudarte.

¿Y si mi hijo o un familiar está ansioso?

En el caso de niños o adultos mayores, usa un lenguaje sencillo, responde con sinceridad y transmite seguridad. Evita asustarlos con detalles innecesarios. Acompáñalos, escucha sus miedos y usa técnicas como juegos, cuentos o música para calmar su mente.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *