Síndrome de Apnea-Hipopnea Obstructiva del Sueño (SAHOS)

El SAHOS es un trastorno del sueño en el que la respiración se interrumpe repetidamente durante la noche debido a un colapso parcial (hipopnea) o total (apnea) de las vías respiratorias superiores. Estas pausas pueden durar varios segundos y ocurrir decenas o cientos de veces por noche.

Como consecuencia, el cerebro se despierta brevemente para reactivar la respiración, lo que fragmenta el sueño y provoca somnolencia durante el día, fatiga y dificultad para concentrarse. Si no se trata, puede tener consecuencias graves a largo plazo.

¿Cómo comprobar los signos y síntomas del SAHOS?

Los síntomas pueden ser observados tanto por la persona afectada como por quienes duermen cerca. Los más comunes son:

  • Ronquidos fuertes y constantes, interrumpidos por pausas en la respiración.
  • Despertares frecuentes con sensación de ahogo o falta de aire.
  • Somnolencia diurna excesiva, incluso después de “dormir toda la noche”.
  • Dolores de cabeza matutinos.
  • Irritabilidad, cambios de humor o problemas de memoria.
  • Boca seca o dolor de garganta al despertar.

En niños, puede presentarse como problemas de atención, hiperactividad o bajo rendimiento escolar, en lugar de somnolencia.

Una polisomnografía nocturna (estudio del sueño) es la prueba que confirma el diagnóstico.

Causas comunes del síndrome de apnea-hipopnea del sueño

Las causas más frecuentes incluyen:

  • Obesidad o sobrepeso, que favorece el colapso de las vías respiratorias.
  • Tamaño aumentado de amígdalas o adenoides, especialmente en niños.
  • Cuello corto o ancho, que reduce el espacio de paso del aire.
  • Uso de alcohol o sedantes antes de dormir.
  • Tabaquismo, que inflama las vías respiratorias.
  • Enfermedades como hipotiroidismo o acromegalia.

Factores hereditarios y el envejecimiento también aumentan el riesgo de desarrollar SAHOS.

Cosas que hacer y que no hacer para aliviar los síntomas

Cosas que SÍ debes hacer:

  • Consultar a un médico especializado en sueño o neumología si hay sospecha de SAHOS.
  • Bajar de peso, si hay sobrepeso u obesidad.
  • Dormir de lado, en lugar de boca arriba, para evitar el colapso de las vías aéreas.
  • Mantener horarios regulares de sueño.
  • Tratar las enfermedades nasales o de garganta, si están presentes.

Cosas que NO debes hacer:

  • No consumir alcohol o sedantes antes de dormir.
  • No ignorar los ronquidos fuertes o pausas respiratorias, aunque no haya cansancio evidente.
  • No automedicarse para dormir sin consultar al médico.
  • Evitar dormir boca arriba, si los ronquidos empeoran en esa posición.

Estas medidas pueden mejorar la calidad del sueño y reducir las interrupciones respiratorias.

Posible tratamiento para el SAHOS

El tratamiento del SAHOS depende de su gravedad y de las características individuales del paciente:

  1. Cambios en el estilo de vida:
    • Pérdida de peso.
    • Evitar alcohol, sedantes y cigarrillos.
    • Dormir de lado.
  2. Uso de CPAP (presión positiva continua):
    • Dispositivo que mantiene las vías respiratorias abiertas mediante aire a presión durante el sueño.
    • Es el tratamiento más eficaz en casos moderados o severos.
  3. Dispositivos orales o férulas mandibulares:
    • Útiles en casos leves, reposicionan la mandíbula para facilitar la respiración.
  4. Cirugía:
    • Para corregir obstrucciones anatómicas (como amígdalas grandes, desviación del tabique, etc.).
    • En niños, suele indicarse la amigdalectomía o adenoidectomía.

El seguimiento debe ser constante y personalizado, idealmente con estudios de control del sueño.

¿Cuándo ir al médico?

Consulta al médico si:

  • Tienes ronquidos fuertes y frecuentes, con pausas en la respiración.
  • Sientes mucho sueño durante el día, incluso al manejar o trabajar.
  • Tienes dolores de cabeza frecuentes al despertar.
  • En niños, hay problemas de conducta, aprendizaje o respiración ruidosa al dormir.
  • Ya estás diagnosticado y el tratamiento no mejora los síntomas.

Un médico del sueño o neumólogo puede hacer el diagnóstico y orientar el tratamiento adecuado.

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