La miopía es un problema de refracción ocular que dificulta ver con claridad los objetos lejanos, mientras que los cercanos suelen percibirse sin dificultad. Esto ocurre cuando la luz que entra en el ojo se enfoca delante de la retina en lugar de directamente sobre ella. Es una condición común que afecta a personas de todas las edades y, en muchos casos, comienza en la infancia o adolescencia.
Causas
La miopía es causada por alteraciones en la forma del ojo que afectan el enfoque de la luz:
- Forma del globo ocular:
- El ojo puede ser más largo de lo normal, lo que provoca que las imágenes se enfoquen antes de llegar a la retina.
- Curvatura de la córnea o el cristalino:
- Si estas estructuras son demasiado curvas, también pueden contribuir al problema.
- Factores genéticos:
- Es más probable desarrollar miopía si uno o ambos padres tienen esta condición.
- Factores ambientales:
- Pasar mucho tiempo realizando actividades en visión cercana (como leer, usar pantallas o escribir) y la falta de exposición a la luz natural pueden aumentar el riesgo.
Signos y síntomas médicos
La miopía puede detectarse por diversos síntomas, entre los más comunes se encuentran:
- Dificultad para ver de lejos:
- Objetos como letreros, pizarras o personas a distancia aparecen borrosos.
- Fatiga visual:
- Sensación de cansancio en los ojos, especialmente después de realizar tareas visuales prolongadas.
- Dolores de cabeza:
- Generalmente relacionados con el esfuerzo continuo para enfocar.
- Entrecerrar los ojos:
- Las personas con miopía suelen entrecerrar los ojos para mejorar el enfoque de objetos lejanos.
- Problemas en la escuela o el trabajo:
- Dificultad para ver claramente lo que se muestra en pizarras o pantallas.
¿Cuándo visitar al médico?
Debe consultarse a un oftalmólogo u optometrista si:
- Hay dificultad para ver claramente los objetos lejanos.
- Se presentan síntomas como dolores de cabeza frecuentes o fatiga visual.
- Los niños muestran signos de entrecerrar los ojos o acercarse mucho a los objetos para verlos mejor.
Un examen visual completo puede detectar la miopía y otras posibles condiciones oculares.
Tratamiento
La miopía no tiene cura, pero puede corregirse de manera efectiva con diferentes métodos:
- Gafas o lentes de contacto:
- Son las soluciones más comunes para corregir la visión borrosa y mejorar el enfoque.
- Cirugía refractiva:
- Procedimientos como la LASIK o PRK pueden modificar permanentemente la forma de la córnea para corregir la miopía.
- Control de la progresión en niños:
- Lentes orto-k (ortokeratología): Lentes de contacto que moldean la córnea mientras se duerme.
- Gotas oftálmicas de atropina en baja concentración para reducir el avance de la miopía.
- Lentes diseñados específicamente para controlar el progreso de la condición.
- Medidas preventivas:
- Aumentar el tiempo al aire libre y reducir el uso excesivo de dispositivos electrónicos.
- Realizar descansos frecuentes durante actividades que impliquen enfoque cercano.