Filariasis Linfática

La filariasis linfática, también conocida como elefantiasis, es una enfermedad parasitaria causada por nematodos (gusanos redondos) transmitidos a los humanos a través de la picadura de mosquitos infectados. Estos parásitos afectan el sistema linfático, causando inflamación, hinchazón crónica y, en casos graves, deformidades. Es más común en áreas tropicales y subtropicales.

Causas

La filariasis linfática es causada por gusanos parásitos del género Wuchereria bancrofti, Brugia malayi y Brugia timori.

  1. Transmisión:
    • Los mosquitos (principalmente Culex, Anopheles y Aedes) actúan como vectores al picar a una persona infectada y transmitir larvas del parásito a otra persona.
    • Las larvas maduran en el sistema linfático, donde los gusanos adultos bloquean el flujo linfático.
  2. Factores de riesgo:
    • Vivir en áreas endémicas (África, Asia, América Latina y algunas islas del Pacífico).
    • Exposición frecuente a picaduras de mosquitos.

Signos y síntomas médicos

Los síntomas varían dependiendo del grado de la infección:

  1. Fase inicial (asintomática):
    • Muchas personas infectadas no presentan síntomas, aunque el parásito puede estar dañando el sistema linfático y los riñones silenciosamente.
  2. Fase aguda:
    • Inflamación y dolor en los ganglios linfáticos (linfadenitis).
    • Fiebre recurrente.
    • Inflamación en las extremidades, genitales o mamas.
  3. Fase crónica:
    • Hinchazón severa (linfedema) en las piernas, brazos, genitales o mamas.
    • Engrosamiento de la piel (elefantiasis).
    • Discapacidad y dificultades para realizar actividades diarias debido a la hinchazón.

En casos graves, la enfermedad puede causar infecciones bacterianas secundarias en las áreas afectadas.

¿Cuándo visitar al médico?

Consulta a un médico si:

  • Presentas hinchazón persistente en las extremidades, genitales u otras partes del cuerpo.
  • Has vivido o viajado a áreas endémicas y experimentas fiebre recurrente o dolor en los ganglios linfáticos.
  • Notas cambios en la piel, como engrosamiento o dureza inusual.

Un diagnóstico se realiza mediante análisis de sangre para detectar microfilarias (larvas) o pruebas de antígenos del parásito.

Tratamiento

Aunque no siempre es posible revertir el daño crónico, el tratamiento ayuda a eliminar los parásitos y prevenir complicaciones:

  1. Medicamentos antiparasitarios:
    • Dietilcarbamazina (DEC) es el tratamiento principal para eliminar las microfilarias.
    • Ivermectina y albendazol se usan en programas de control masivo.
  2. Manejo del linfedema:
    • Higiene adecuada de las áreas afectadas para prevenir infecciones.
    • Drenaje linfático manual y ejercicios para reducir la hinchazón.
    • Uso de vendajes o medias de compresión.
  3. Cirugía:
    • En casos graves, se puede considerar la cirugía para corregir deformidades o reducir el linfedema extremo.

Prevención

  • Control de mosquitos:
    • Usar mosquiteros, repelentes de insectos y ropa protectora.
    • Eliminar criaderos de mosquitos, como agua estancada cerca de las viviendas.
  • Programas de quimioterapia preventiva:
    • Administración masiva de medicamentos antiparasitarios en áreas endémicas para interrumpir la transmisión.
  • Educación comunitaria:
    • Informar sobre las medidas de prevención y la importancia de tratar la enfermedad a tiempo.

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